Los All Blacks superaron a unos feroces Wallabies al final del partido y de esa manera pasaron una excitante prueba por 28-24 para asegurarse la posesión de las Copas Tri-Nations y Bledisloe durante otro año.
Al término del primer tiempo, los neocelandeces iban abajo 7-17, pero ahí reaccionaron y sumaron tres tries en 17 minutos, para de esa manera ganar por cuarta vez consecutiva el título Tri-Nations y conservar la Copa Bledisloe por quinto año al hilo.
Pero los All Blacks debieron pelear el partido hasta el final, después de que un try del Wallaby Ryan Cross cuando quedaban dos minutos redujo la diferencia y los visitantes se vieron obligados a defender desesperadamente mientras pasaban los últimos segundos.
Los visitantes sumaron cuatro tries contra tres en el Suncorp Stadium y se fueron a casa mientras que gran parte del estadio alentaba al equipo gritando "All Blacks". El capitán, Richie McCaw y su equipo exultante se abrazaron tras oír el silbato que dio fin al partido.
Los All Blacks dieron los golpes mortales en los minutos 62 y 67 cuando el halfback de reserva Piri Weepu anotó y luego Daniel Carter derribó a dos defensores para darles un margen de 11 puntos, que fue suficiente.
Esta victoria fue un triunfo para el entrenador Graham Henry, quien había sido superado por el entrenador de los Wallabies, Robbie Deans, en Sydney el pasado julio, antes de que los All Blacks se recuperasen con victorias en la Tri-Nations en Auckland, Cape Town y Brisbane.
Para Deans, su debut en la temporada de la Tri-Nations terminó con derrotas en fila después de haber comenzado bien en su puesto.
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